Serie de Harry Potter 140/199: «La victoria de Snape»

Y llegamos al capitulo número 140 de nuestra publicación diaria y cronológica en la cual durante 198 días estaremos compartiendo nuestras sorpresas, anécdotas y opiniones acerca de cada uno de los capítulos de la saga de Harry Potter para luego finalizar con el Epilogo. El día de hoy es el turno para el capitulo número 140 de la Serie de Harry Potter.

Harry Potter y el Príncipe Mestizo

Capítulo 8: La victoria de Snape

La jugarreta de Draco parece haber salido a la perfección: Harry está inmóvil y invisible, y será casi imposible encontrarlo. De hecho, es muy probable que pasen horas hasta que alguien note su ausencia. Afortunadamente para él, poco después de que el Expreso de Hogwarts emprenda su marcha de regreso a Londres, Nymphadora Tonks aparece en el compartimiento de los alumnos de Slytherin y lo encuentra. La Auror y el chico deben saltar del tren en movimiento e ir a Hogwarts a pie.

Si bien Tonks le cura la nariz a Harry, sigue con el mismo aspecto y estado de ánimo deprimido que en la ocasión previa en que se vieron. La bruja envía un Patronus (cuya forma es la de una criatura de cuatro patas) con destino al castillo y conduce a Harry a la verja por la que se entra a los terrenos del colegio. Harry intenta abrir la verja él mismo mediante un Alohomora, pero los hechizos protectores son demasiado fuertes y deben esperar a que venga alguien a abrirles. Para desagrado de nuestro héroe, quien viene a darles entrada no es otro que Severus Snape. El profesor despide a Tonks, no sin antes hacer maliciosos comentarios acerca de su nuevo Patronus, y luego escolta a Harry al castillo. En el camino, Snape le quita setenta puntos a la Casa de Harry por haber llegado tarde y con ropas muggles al banquete inaugural, y se burla del chico por haber establecido un record de rapidez al perder puntos a esas alturas de un año escolar. Harry permanece en silencio, no queriendo dignarse a hablar con su odiado profesor, que en un último castigo lo obliga a entrar al Gran Comedor sin cambiarse. Draco ya está proclamando a los cuatro vientos su versión de los hechos, y Harry prefiere no contarles nada a sus amigos en público.

Dumbledore no tarda en dar su primer discurso anual, dando la bienvenida a los nuevos y viejos estudiantes, anunciando que por pedido de Filch están prohibidos todos los productos de Sortilegios Weasley, y que se necesita un nuevo relator para los partidos de Quidditch. Finalmente, el director les presenta a su nuevo profesor, Horace Slughorn, que enseñará Pociones. Severus Snape, añade Dumbledore, será el nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. Con esa -para Harry, mala- noticia y advertencias acerca de la necesidad de respetar las medidas de seguridad vigentes en el colegio ante el regreso de Lord Voldemort al poder, Dumbledore concluye su discurso y envía a los alumnos a la cama. En el camino a la Torre de Gryffindor, Harry le cuenta a Ron lo sucedido en el Expreso de Hogwarts, y si bien su amigo no se ríe por el incidente con Draco, tampoco considera que las palabras del chico de Slytherin signifiquen realmente que Voldemort le asignó una misión en Hogwarts. Los chicos también se encuentran con Hagrid, quién les habla acerca de los «progresos» de su hermano Grawp en el aprendizaje del idioma y las costumbres humanas, e incluso habla de sus ingenuas esperanzas de que el gigante pueda actuar como su ayudante durante sus clases de Cuidado de Criaturas Mágicas. Se despide de ellos creyendo que al día siguiente tendrán clases con él, y solo entonces Harry y Ron se percatan de que ni ellos ni Hermione cursarán su materia. Pronto deberán darle a Hagrid otra mala noticia.

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