Pottermore va al set de Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos

«Tengo una adivinanza: Estoy frente a una de las calles de Nueva York pero no he dejado Inglaterra. Puedo ver pretzels pero no los puedo oler, y definitivamente no se me permite tocarlos. ¿Dónde estoy?

Estoy en el set de Animales Fantásticos, por supuesto».

Así comienza el corresponsal de Pottermore su recorrido por el set en Warner Bros Studios Leavesden, en la réplica de Nueva York preparada para esta nueva película de la franquicia de Harry Potter. ¿Cómo es posible crear una réplica magnifica de la ciudad original? El corresponsal sigue:

Aquí hay una pista: consigue a las mentes más creativas en el negocio.

El legendario diseñador Stuart Craig, quien trabajó en las películas de Harry Potter, encabeza el equipo que construye a la Nueva York de 1920. Trabajó junto a David Yates y David Heyman en toda la estética de la película. Ha sido nominado al Oscar en diez ocasiones, y ha ganado tres de ellas (por The English Patient, Dangerous Liaisons y Gandhi).

Ahora mismo, estoy frente a la decoradora del set Anna Pinnock, quien es responsable del diseño de las ventanas, todos los accesorios y los muebles. Anna consiguió un Oscar por su trabajo en El Gran Hotel Budapest en 2014. También ha trabajado en tres películas de James Bond, incluendo Spectre. Si necesitas construir una réplica de tamaño real de una ciudad en un lugar donde la ciudad ni siquiera existe, ella es la mujer correcta para hacerlo.

Y de esta manera, el corresponsal comienza el tour:

Comenzamos en Lower West Side, donde los ladrillos están sucios, los carteles están despegándose de las paredes, y la mayoría de las cosas tienen un color marrón. Todas las señales y los pósters fueron diseñados por Mina Lima. No solo hemos viajado de América sin dejar Inglaterra. Hemos viajado a 1926 sin dejar 2015.

Cada detalle del set de Animales Fantasticos grita los años 20. Cada cartel, cada encabezado de la prensa, cada menú de restaurante, cada ventana, cada escaparate, cada puesto de comida, cada farola.

Hay varias calles adoquinadas, y si estás de pie en el lugar correcto, puedes ver el camino desde Lower West Side hasta Upper East Side.

Puedes ver la parte de afuera del apartamento de Tina y de Queenie, a la vez que hay restaurantes, una iglesia y muchas tiendas. Anna me confiesa que ellos tuvieron que desechar la fachada recientemente y volverla a hacer de manera diferente, debido a un cambio de último minuto.

La logística de este trabajo —hacer una ciudad, destruir la ciudad, hacer una habitación, destruir esa habitación— hace que me duela la cabeza.

Por suerte para mí, nos acercamos al interior del apartamento de Tina y Queenie Goldstein. Vi sus camas, estuve en su sofá, revisé sus libros y me miré en sus espejos. Pero de esto hablaré en otra ocasión, debo encontrar la manera de regresar al Londres de 2015.

Vía Pottermore

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