Por: Nymphadora_Granger
Era una linda noche de luna llena, el cielo estaba estrellado como pocas veces y se reflejaba en el techo del gran comedor del Colegio Hogwarts de Magia y HechicerÃa, en donde un chico de 11 años lo contemplaba con especial atención.
Este chico era Ted Remus Lupin Tonks, que era un chico de cabellos negros, ojos color miel y tez pálida. Para Teddy – Como le decÃa su familia- las noches de luna llena eran extrañamente especiales, le hacia recordar mucho a sus padres, sabia que su padre habÃa sido un hombre lobo y sufrÃa por tener esa condición, pero Teddy todavÃa no entendÃa como algo tan bello podrÃa causarle a alguien tanto sufrimiento, cuando a el simplemente le fascinaba.
Luego de finalizado el banquete de bienvenida, el prefecto de Hufflepuff llamo a los de primer curso para dirigirlos a la sala común y mostrarles sus dormitorios, Teddy caminaba feliz por que el Sombreo Seleccionador habÃa tomado en cuenta sus preferencias al momento de asignarlo a una de las casa del colegio; mientras caminaba recordaba las palabras del sombrero.
– Si… aquà esta todo… hay mucha inteligencia en tu cabeza, pero veo que eres muy valiente también; veamos… ¿en que casa te pondré?…
– ¿Puedes ponerme en Hufflepuff?- Pensó Teddy
– ¿Ah? ¿Por qué quieres ir a Hufflepuff?
– Es que es la casa a la que perteneció mi madre y quiero demostrarle a todos que no solo es la valentÃa, la inteligencia o la astucia lo que te identifica.
– Si la recuerdo, una chica especial… tienes muy buenos valores chico… ¿estas seguro?
– Si muy seguro- Aseguro Teddy
– Entonces tu casa será…. ¡¡¡¡HUFFLEPUFF!!!
No se dio cuenta cuando llego al frente de un gran cuadro de un paisaje, supuso que era la entrada a la sala común, estaba ten inmerso en sus pensamientos que se perdió su primer «paseo» por el castillo -Me quedan siete años por delante para conocerlo -Pensó.
Le signaron su habitación, la cual compartirÃa con otros tres chicos, Teddy escogió la cama que estaba al lado de la ventana, tenia una excelente vista de los terrenos del colegio y del lago negro.
Estaba cansado y habÃa comido tanto en el banquete que lo único que querÃa era ir a dormir. Luego de presentarse y conocer a sus nuevos compañeros, se puso su pijama y se metió en su cama y corrió las cortinas, pero antes de quedarse dormido se acordó de lago muy importante que habÃa previsto hacer en cuanto llegara a su nueva habitación.
Salio de su cama y abrió su baúl, no tuvo que buscar mucho para hallar lo que necesitaba, dos fotografÃas enmarcadas en portarretratos, que el mismo habÃa hecho cuando era más chico; se metió nuevamente en su cama y contemplo las fotografÃa.
En una aparecÃa una joven mujer -de cabello color rosa, cara en forma de corazón, ojos oscuros y tez pálida- que sostenÃa a un pequeño bebe entre sus brazos y sonreÃa feliz a la cámara, eventualmente rozaba su nariz con la del bebe. En la otra fotografÃa aparecÃa la misma mujer, pero ahora la acompañaba un hombre -de cabello castaño con mechones grises, ojos color miel, y en la cara tenia cicatrices- Quien ahora sostenÃa al bebe con un brazo y con el otro abrazaba a su esposa, Ambos sonreÃan felices y se daban un tierno beso en los labios.
Estas personas eran los padres de Teddy, Nymphadora Tonks y Remus Lupin quienes habÃan muerto en la segunda guerra entre magos, cuando Teddy era solo un bebe de pocos dÃas de nacido, esas fotografÃas era el único recuerdo que Teddy tenia de ellos como familia. Teddy se quedo mirando las fotografÃas hasta que sin darse cuenta se durmió.
Teddy caminaba por los terrenos del castillo, la noche era igual como la habÃa visto, en el banquete de bienvenida y la luna se reflejaba en la superficie del lago, no se veÃa a ningún estudiante por ahÃ, cosa que le pareció raro a Teddy, pero aun asà sentÃa que debÃa estar allÃ, en eso preciso momento.
Siguió caminando, cuando de repente escucho que lo llamaban.
-Teddy!!- era una voz que nunca habÃa escuchado pero que extrañamente era muy familiar.
Teddy volteo para ver quién lo llamaba y la vio ahà estaba ella, a solo pasos de el, esperándolo con los brazos abiertos y con una sonrisa radiante; la reconoció al instante era su madre, camino rápidamente los pasos que los separaban para encontrarse con aquel abrazo que lo esperaba.
La abrazo con todas sus fuerzas, ella le correspondió y le dio un beso en la coronilla. Fue un abrazo calido lleno de amor, el no querÃa soltarla, temÃa que si lo hacia ella se irÃa, querÃa quedarse ahà para siempre.
-TodavÃa no me voy, déjame verte bien- Dijo Tonks divertida.
Pero Teddy no querÃa separarse de ella, querÃa seguir allà donde encajaba perfectamente, querÃa seguir oliendo su aroma, seguir escuchando el sonido de su corazón, querÃa grabar todo esto en su memoria.
-Bueno si te quieres quedar asà yo no tengo problemas, esto me agrada- Dijo Tonks mientras lo estrechaba más y volvÃa a besarlo en la coronilla.
Pero Teddy sintió que algo calido y húmedo mojaba su cabeza, levanto la cara y una de las lágrimas de su madre cayo sobre su mejilla.
-No estés triste mamá- Dijo Teddy mientras levantaba la mano por una de las mejillas de Tonks, secándole las lágrimas.
-No lloro de tristeza, lloro de felicidad, me alegra mucho poder verte y abrazarte otra vez-
-Yo también estoy feliz mamá, pero como es esto posible, es real o estoy soñando.
– Si y no, pero no me preguntes como funciona porque la verdad no lo sé- Dijo Tonks al ver la expresión de Teddy- pero eso no importa, lo importante es que me han dado esta oportunidad, para volver a verte y despedirme como se debe.
Teddy no sabia que decir antes esas palabras, como que despedirse, entonces si era un sueño, pero ella era tan real, ¿como podÃa ser un sueño?
Yo solo quiero que escuches esto con atención y que me prometas que lo cumplirás -Dijo Tonks mirando a los ojos de su hijo- ¿Me lo prometerás?
Teddy se quedo pensando un instante, que era eso que querÃa que le prometiera, pero al final respondió:
– Claro pero ¿Qué te voy a prometer?
– Quiero que me prometas que no dejaras que nada te impida disfrutar de la vida, que no dejaras que los prejuicios de las personas quebrante tu espÃritu ni un ápice, yo sé lo que es que te miren mal, solo por el hecho de existir y tu eres doblemente especial, eres único Teddy ten eso presente.
Tienes que prometerlo más ahora que comienza tu vida aquà en Hogwarts, en donde estoy segura que habrá muchos que querrán ponerte de menos, promételo.
Ante las palabras de su madre Teddy no tenÃa opción.
– Si mamá te lo prometo
– Espero que cumplas tu promesa mira que te estaré vigilando- dijo divertida Tonks y se agacho hasta quedar a la altura de Teddy y lo miro fijamente a los ojos.
– Me tengo que ir
– ¿Por qué? No te vayas quédate conmigo -Dijo Teddy y sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.
– Yo siempre estaré contigo bebe – Le aseguro y puso su mano en el pecho e Teddy- AquÃ, no lo olvides, siempre que pienses en mi estaré contigo, porque tú eres parte de mi como yo soy parte de ti – Añadió y se le quebró la voz, que no pudo contener las lágrimas que comenzaron a caer silenciosamente por su rostro.
Teddy tampoco pudo contenerse al ver a su madre llorar, él entendÃa su dolor pues era suyo, el no querÃa perderla de nuevo, querÃa quedarse con ella, asà que se acerco a ella y la abrazo y le dijo:
– De verdad no quiero que te vayas, no me quiero despertar.
Tonks lo abrazo más fuerte, durante un minuto se quedaron asÃ, escuchando sus llantos silenciosos, hasta que Tonks se separo de Teddy.
– Siento mucho no poder quedarme, no sabes cómo me duele en el alma dejarte de nuevo, se me parte el corazón verte llorar, pero no puedo -le dijo Tonks muy triste.
– No te vayas -Repitió Teddy, abrazándola más fuerte.
– De verdad no puedo bebe, no puedo -Dijo Tonks llorando y estrecho a Teddy tanto que lo alzo del piso, le dio un beso en la mejilla, lo bajo de nuevo, lo aparto para verle de nuevo la cara y le limpio la lágrimas y agrego:
Te amo, nunca lo olvides, por cierto ese color de cabello te queda genial!!, lo abrazo de nuevo y le susurro: te estaremos esperando.
Teddy abrió los ojos, estaba de nuevo en su cama en la sala común, un tenue rayo de luz solar se colaba por las cortinas de su cama, se llevo una mano a los ojos para frotárselos y las fotografÃas se cayeron, entonces el recuerdo de ese sueño regreso a su mente; todo habÃa sido tan real para el.
Se levanto de la cama y vio que sus nuevos compañeros se estaban colocando sus túnicas para, irse a su primera clase, uno de ellos volteo su mirada hacia Teddy y este vio sorpresa reflejada en ella
– ¿Qué pasa?, le pregunto un poco confundido
– Es tu cabello, es de color… Azul- contesto el chico aun mas confundido que Teddy, al oÃr esta palabras los otro chicos miraron a Teddy
– ¿Azul? ¿Cómo que azul?- pregunto Teddy fue directo al baño a verse en un espejo, cuando se vio no pudo ocultar su sonrisa, tenÃa el cabello de color azul eléctrico y se acordó de nuevamente de su sueño.
– Ahora entiendo con que te referÃa al color de cabello mamá, pienso lo mismo que tu, me queda genial, pero si esto fue un sueño ¿Cómo es que tengo este color de cabello?- se pregunto a si mismo- La verdad creo que nunca lo sabré, pero de algo estoy seguro cumpliré esa promesa.
Teddy se vistió y durante todo el dÃa no pudo dejar de pensar en ese sueño, no dejaba de pensar si habÃa sido magia o realidad.