Muchos de nosotros, amantes incondicionales de Harry Potter y su mundo, nos lanzamos a la carga cuando surgió una nueva esperanza de revivir la aventura.
Pottermore, la novÃsima experiencia interactiva, la idea prodigiosa de J. K. Rowling apareció justo en el momento oportuno. El estreno de «Las Reliquias de la Muerte» (parte dos) era un hecho, y varios medios hablaban acerca del fin de la saga más lucrativa, seguida y best-seller de la historia.
Cuando gracias a este mismo Blog supe que Rowling habÃa anunciado un proyecto nuevo, sentà que el vacÃo se disipaba. Rà pidamente busqué en las publicaciones pottéricas para «empaparme» sobre el asunto, y cuando vi el video promocional y a Jo tan hermosa, me convencà de que una nueva aventura habÃa comenzado.
Luego me dediqué a ser paciente: la inscripción para Pottermore no iniciarÃa hasta Halloween (31 de octubre); sin embargo, cuando se comenzó a manejar la promoción «La Pluma Mágica» me mantuve atento dÃa a dÃa, esperando mi oportunidad. Al principio me parecÃa injusto que para América las horas de inscripción fueran en la madrugada; pero mis plegariasd fueron escuchadas y, en los últimos dÃas, la Pluma salió de su tintero en horarios de fácil acceso para esa parte del mundo.
Por fin el quinto dÃa logré ganar una plaza para probar la versión Beta del sitio.
Ahà comenzó la decepción…
La decepción
Desde que me inscribà hasta que por fin pude acceder pasaron casi dos meses. Cada semana Insider publica una nueva disculpa relacionada con errores, fallos y asuntos «aun por resolver» en Pottermore. Da la impresión de que entre las ideas de Rowling y la parte tecnológica existe una especie de «divorcio».
Claramente tanto en la fecha de inscripciones para todo el mundo como en la de la Pluma Mágica, estaba la intención numerológica y mágica de la autora. No obstante, hace unos dÃas, Insider se actualizó para informar de que la versión Beta se extenderá un poco más de lo previsto; y no solo eso: la tienda on-line abrirá en noviembre.
Estoy seguro de que esos hechos no se corresponden directamente a J. K. ; si dependiera de ella todo seguirÃa el curso previsto.
 Aquà sin dudas el problema tecnológico es lo que más pesa. Los programadores de Pottermore, sinceramente, se encuentran en mi lista de personajes indeseables; y estoy seguro de que son los mejores pues Rowling y la Sony poseen tanto el tacto como la plata para contratar lo mejor en todo el mundo, relacionado con sus intereses.
Tal vez llevar a lenguaje web (diferente a una consola de juegos) el mundo mágico de Harry Potter sea una exigencia muy alta. Sin embargo no me parece que ese sea el mayor problema: lo peor es que nos convocan a una versión Beta que obviamente no posee la infraestructura necesaria para albergar al millón de personas que se propuso como meta inicial. Basta intentar avanzar rápido en la historia para que salga el archi-odiado cartel de sobrecarga del sitio, o los 15 segundos que se estiman para refrescar la página y se convierten en 15 minutos o hasta más, al punto de que es preferible irse a una web menos inestable que esperar a que se termine de cocer una poción.
Y hablando de pociones… Personalmente las detesto, y no por Snape ni nada parecido, sino porque intentar hacer una se demora siglos: podrÃa soñar con cerdos verrugosos tres veces y refundar Hogwarts otras tantas que, cuando terminara, mi poción irÃa por el 33 %. O mejor que eso, me dirÃan «vuelve en tres minutos» y al hacer clic en algo más tendrÃa que empezar de nuevo.
 En pocas palabras: en lugar de entretenerme, a veces siento que Pottermore es realmente inútil, imposible, y que me esfuerzo demasiado intentando que la página se cargue correctamente o la poción se cueza.
Otra cosa que me choca un poco y espero ser el único es el hecho de que ya me leà la historia, y tener que avanzar capÃtulo por capÃtulo se convierte en una especie de carga. Sobre recolectar determinados objetos, no quiero parecer petulante, pero ya existe el Detective.
También me parece importante resaltar que se habÃa dicho desde el principio que en la Beta, los fans podrÃamos dar nuestra opinión para ayudar a construir el sitio; sin embargo no es asà del todo: cuando intenté opinar me salió un formulario que realmente no aportaba nada acerca de determinadas especificidades que nos inquietan. Pensé que serÃa como el Beta de Google+ , que muestra un campo de texto que el usuario puede llenar con su opinión, dudas y sugerencias, no un simple «te gusta» «no te gusta» «marca aquÃ, aquà y aquû.
La fascinación
He dejado para cerrar este comentario aquellas cualidades que me gustarÃa destacar.
Lo más atractivo del sitio es, sin dudas, el diseño. Desde la página de acceso hasta cada uno de los paisajes están distribuidos de manera equilibrada en lo que a colores y elementos se refiere. Las ilustraciones, botones y áreas interactivas tienen un cuidado trabajo artÃstico, dignos de una galerÃa. La prueba de Ollivander es genial. Parece una sarta de preguntas al azar, pero detrás de la asignación se halla un componente muy «rowlineano», mágico. Además, la ceremonia de selección en Hogwarts es anti-trampas: por más que intenté «acomodarla»Â a la casa que prefiero, las preguntas de Pottermore son enigmáticas, e intentan revelar la esencia de cada cual. Es de lo más esperado por todos, también de lo mejor pensado, en mi opinión.
Desde ya empiezo a imaginar cómo captaran nuestra atención el resto de los libros. Siempre será un ingrediente fundamental la competencia entre las casas, aunque me asalta una duda: ¿cuándo se entrega la Copa de la Casa?
Pottermore es un buen proyecto, esperemos que todo este proceso le sirva para llegar a la perfección que todos estamos esperando y que Rowling continúe en nuestra lista de personas favoritas.