Si no puedes formar parte del universo Harry Potter, deja que sea el universo Harry Potter el que forme parte de tu vida. Siempre puedes hacerte, además de con las novelas y las pelÃculas que han adaptado dichas novelas, con réplicas, merchandising y props de las pelÃculas, o incluso con otros materiales relacionados que son carne de coleccionismo. Claro que, si bien para conseguir esto no hace falta magia, lo más recomendable es una cuenta de ahorros bien robusta en Gringotts o cualquier entidad bancaria de preferencia.
Seguro que ese es el secreto de los compradores de estos 9 objetos de coleccionismo relacionados con el mundo de Harry Potter. Ahora bien, si quieres presumir de tener las auténticas gafas de Harry Potter o un manuscrito de J. K. Rowling (o su propia silla de escribir), la inversión merece la pena especialmente si eres un fan de este mundo de magia y aventuras. Y de dinero, sobre todo de dinero. ¿Cuál te gusta más?
La carta de Hogwarts
Es el documento más deseado por los fans de medio mundo: la carta de Hogwarts. ¿EstarÃas dispuesto a pagar 6.500 dólares por una de ellas? Es lo que se llegó a pagar en septiembre de 2015 en una subasta de Londres por la carta de Harry Potter que se utilizó en el rodaje. Mientras que muchas de ellas fueron impresas en masa, esta tiene el sello original del Colegio de Magia y HechicerÃa.
La Snitch dorada
Pocos eran capaces de cazarla, pero contar con 7.000 dólares en la cuenta del banco cambia las cosas. Por esta cantidad se vendió en una subasta en 2012. En realidad, la Snitch no está hecha de oro, sino de una resina y plástico recubierta de pintura dorada.
La escoba de entrenamiento de Harry
La escoba que aparece en La piedra filosofal con la que Harry aprende a volar fue subastada en el mismo evento que la Snitch y llegó a alcanzar los 11.500 dólares, muy superior a los 5.000 que habÃan estimado. La escoba se diferenciaba de otras por la H que tenÃa grabada en el mango y la palabra Harry en la cabeza de la escoba.
Esta varita es poderosa dentro y fuera del mundo de Harry Potter. Aunque en la realidad no tiene poderes, muchos seguidores querÃan ser sus dueños, lo que provocó que se vendiese por 10.100 dólares en una subasta en California en 2013. Que fuese utilizada por Ralph Fiennes y Daniel Radcliffe aumentó su precio.
Hay pocas personas que puedan llevar gafas redondas y presumir de ellas: John Lennon, Ozzy Osbourne y, por supuesto, Daniel Radcliffe, aunque éste último sólo lo haga en la ficción. Durante el rodaje de la saga se utilizaron numerosos pares de gafas y uno de ellos se vendió en una subasta en Los Angeles en 2015 por 20.000 dólares.
Si eres uno de los pocos afortunados que tiene un ejemplar de la primera edición de Harry Potter que salió a la venta en Reino Unido, tienes un auténtico tesoro. Solo salieron a la venta 500 ejemplares, por lo que son realmente codiciados. Pero este libro vendido en 2013 es mucho más que eso, ya que cuenta con las notas personales de J.K. Rowling. ¿Su precio? 228.000 dólares.
Las subastas de objetos de Harry Potter no son cosa de estos últimos años. En 2001, tan sólo unos años después de que se publicase La piedra filosofal, se subastó la portada original que diseñó Thomas Taylor y fue vendida a un americano por más de 125.000 dólares. ¿Cuánto costarÃa en la actualidad esta pieza?
La silla de J.K.Rowling
En esta silla ha estado sentada J.K. Rowling durante horas y horas para poder escribir La piedra filosofal y La cámara secreta. Ella la adquirió en una iglesia -según dice la eligió porque era la más cómoda- y en 2002 decidió regalarla con fines benéficos. Desde entonces ha pasado por varias manos, pero la última transacción tuvo lugar en abril de 2016, cuando se vendió por 394.000 dólares. Quizás el que la compró querÃa que se le pagase un poco de la creatividad que caracteriza a la escritora.
BONUS: Los cuentos de Beedle el Bardo
El objeto que ha alcanzado el precio más alto en una subasta no forma parte del atrezzo. Fabricaron siete ejemplares manufacturados de Los cuentos de Beedle el Bardo encuadernados en cuero y plata con ilustraciones de la propia J.K. Rowling. Uno de esos volúmenes llegó a venderse por casi 3 millones de dólares, dinero que fue a parar a la ONG The children’s voice. El postor ganador no fue otro que Amazon. Más tarde, Rowling dejó que el portal vendiese réplicas de edición limitada que aún puedes encontrar de segunda mano.
VÃa SC
