Siguiendo con nuestra publicación diaria y cronológica hasta el próximo 21 de Noviembre, en la cual durante 198 dÃas estaremos todos juntos compartiendo nuestras sorpresas, recuerdos y opiniones de cada uno de los 198 capÃtulos de la saga de Harry Potter para luego finalizar con el EpÃlogo. Hoy es el turno para el capÃtulo No. 28 de la serie de Harry Potter.
Harry Potter y la Cámara Secreta
CapÃtulo 11: El club de duelo
Harry despierta en la enfermerÃa y sale a buscar a sus amigos, a quienes finalmente encuentra en el baño de Myrtle la Llorona preparando la poción Multijugos. Les cuenta acerca de la visita nocturna de Dobby e intercambian teorÃas acerca de los Malfoy y la Cámara Secreta. Hermione le dice a Harry y a Ron que necesita dos ingredientes más para terminar la poción y que deberán robarlos del despacho del profesor Snape. Se ponen de acuerdo en que los chicos crearán una distracción durante la clase de Snape, y que Hermione aprovechará la ocasión para robar los ingredientes (Hermione se ofrece porque tiene un «historial limpio»). Harry arroja una bengala en el caldero de Goyle, causando que explote y salpique a todos los presentes -especialmente al propio Goyle y a Draco-, permitiendo que su amiga consiga el cuerno de bicornio y la piel de serpiente arborÃcola africana.
Poco después el trÃo se entera de la creación de un Club de Duelos, y se inscriben con la esperanza de que los entrenen para pelear contra el monstruo de Slytherin, pero se llevan una decepción al ver que las clases están a cargo del profesor Lockhart y de Snape. Lockhart inicia un duelo con Snape, como «demostración», y es Desarmado instantáneamente, pero se las arregla para que parezca que se dejó Desarmar e incluso afirma que Snape habÃa ocultado mal sus intenciones de atacarlo de esa manera. No queriendo arriesgarse a otro round con el profesor de Pociones, Lockhart hace que los alumnos se pongan en parejas y se Desarmen unos a otros. Snape, malignamente, junta a Harry con Draco y a Hermione con Millicent Bulstrode. Las instrucciones son solo usar el Expelliarmus, pero Draco y Harry no pueden evitar lanzarse otros hechizos y tienen que ser separados. Millicent, por su parte, prefiere utilizar su fuerza fÃsica contra Hermione en vez de su varita, y Harry debe intervenir para terminar con la golpiza. Y el pobre Ron lastima a Seamus Finnigan por culpa de su varita rota.
A continuación Lockhart decide detener las caóticas peleas y hacer pasar al frente a una sola pareja para demostrarles cómo se deben batir en duelo. Snape nuevamente propone a Harry y a Draco, y Lockhart acepta. El jefe de Slytherin susurra instrucciones al oÃdo de Draco y su alumno preferido utiliza el Serpensortia, materializando una inmensa serpiente. Lockhart intenta proteger a Harry pero eso solo sirve para lanzar la serpiente hacia Justin Finch-Fletchey. Harry, actuando por impulso, le grita al reptil que se detenga y éste obedece. Sin embargo, los estudiantes no reaccionan bien sino como si Harry hubiera hecho algo escalofriante (y Snape contempla a Harry con «una mirada astuta y calculadora»). La clase se suspende, y Ron y Hermione arrastran a Harry a un lugar privado. Allà se enteran de que su amigo habla pársel, y le explican que ese poder no es precisamente bien visto en ese contexto, ya que Salazar Slytherin lo hablaba y el que Harry comparta esa facultad podrÃa ser interpretado como que él es su descendiente y Heredero.
Al dÃa siguiente, tras pasar la noche preguntándose si su lugar estaba en Gryffindor o en Slytherin, Harry va a buscar a Justin para explicarle cómo fueron realmente las cosas. Encuentra a los compañeros de Casa del chico en la biblioteca y tiene una discusión con Ernie MacMillan, quien manifiesta sus sospechas hacia él y le aclara que proviene de una familia de sangre pura, como temiendo que Harry vaya a atacarlo. Furioso, Harry se va del lugar y tiene la mala suerte de toparse con Justin y con Nick Casi-Decapitado petrificados. Intenta alejarse de los cuerpos antes de que lo vean, pero Peeves alerta a todo el castillo a los gritos. Harry aparece ahora como el principal sospechoso de los ataques, al haber sido encontrado en la escena del crÃmen, y la profesora McGonagall se lo lleva a la oficina de Dumbledore; se trata de la primera visita de Harry a ese lugar, y ciertamente no será la última.