Y llegamos al capitulo número 174 de nuestra publicación diaria y cronológica en la cual durante 198 dÃas estaremos compartiendo nuestras sorpresas, anécdotas y opiniones acerca de cada uno de los capÃtulos de la saga de Harry Potter para luego finalizar con el Epilogo. El dÃa de hoy es el turno para el capitulo número 174 de la Saga de Harry Potter.
Harry Potter y las Reliquias de la Muerte
CapÃtulo 12: La magia es poder
Mientras avanzaba agosto varias personas se detenÃan a observar el lugar que estaba entre el numero 11 y 12 de Grimmauld place. No habÃa dÃa en que no hubiera una o dos personas vigilando el lugar y, aunque nunca eran los mismos, siempre llevaban las mismas ropas extrañas. HabÃa veces en que dejaban su punto de guardia para correr a los edificios, como si hubieran visto lo que buscaban, pero siempre regresaban decepcionados. El 1 de septiembre mucha mas gente merodeaba por la plaza con actitud de alerta, entonces se dio una de las veces en que corrÃan hacia los edificios, pero tras un momento volvieron a estar inmóviles con expresión de frustración.
Mientras tanto Harry entraba al vestÃbulo del número 12 anunciándoles a sus amigos que traia malas noticias. La cocina estaba irreconocible pues ahora todo estaba limpio. Pero nada habia cambiado tanto como el elfo domestico, que ahora lucia un aspecto pulcro y además se habia vuelto mas amable.
Las noticias que Harry traÃa eran que Snape habÃa sido nombrado director de Hogwarts. En cuanto Hermione terminó de leer la noticia se levantó de su silla y dijo que regresaba en un momento. Mientras Harry y Ron hablaron de los que ocuparÃan el puesto de defensa contra las artes oscuras y Pociones, los hermanos Carrow, que Harry reconoció como mortifagos, dos de los que habÃan estado en la torre cuando asesinaron a Dumbledore. Ron dijo que sentÃa raro no estar en el tren con dirección a Hogwarts y Harry se imaginó a Ginny, Luna y Neville en el mismo compartimento preguntándose donde estarÃan sus amigos o la mejor manera de minar el nuevo régimen de Snape. Hermione volvió con el retrato de Phineas Nigellus, como en el despacho de Snape también habÃa uno, Snape podrÃa mandarlo a espiarlos.
Harry habÃa ido a hacer guardia fuera del ministerio, para vigilar en caso de que apareciera Umbridge, pero ella nunca entraba por ahÃ, según Ron muchos empleados viajaban por Red Flu y ella debÃa considerarse muy importante como para viajar a pie. Cuando Ron y Hermione discutÃan sobre la importancia de saber o no el color de túnica del personal de mantenimiento del ministerio cuando intentaban infiltrarse en el ministerio, Harry los interrumpió diciendo que debÃan hacerlo al dÃa siguiente ya que no importaba cuando tiempo mas estuvieran planeando, no lograrÃan estar más preparados. Harry supo por las caras de sus amigos que estaban asustados, él también estaba asustado, pero sabia que habÃa llegado el momento de poner en práctica el plan.
Mientras bromeaban sobre si Harry debÃa esconderse mientras los otros dos derrotaban a Voldemort, Harry sintió una punzada en la cicatriz e intento disimular el movimiento de su mano apartándose un mechón del pelo, ya que Hermione lo estaba viendo. Se dirigió al baño para que no lo vieran sus amigos. Pudo ver como Voldemort llegaba a casa de una mujer que tenia dos hijos y preguntaba por Gregorovitch, pero esta le decÃa que el no vivÃa ahÃ, después Harry solo vio un destello de luz verde. Sus amigos le preguntaron que le pasaba, ya que habÃa estado gritando. Aunque Harry intentó mentirles, sus amigos se dieron cuanta que le habÃa dolido la cicatriz. Harry dijo que no le gustaba esa conexión, pero como no podÃa evitarla, la utilizarÃa. Harry les contó que Voldemort seguÃa buscando a Gregorovitch para averiguar sobre la acción de la varita de Harry. Sus amigos seguÃan creyendo que Harry habÃa controlado la varita, pero Harry y, el parecer, Voldemort sabÃan que no habia sido asÃ.
Esa noche no se durmieron muy tarde, solo repasaron el plan hasta que los tres se lo supieron de memoria. El amanecer llego muy rápido y los tres amigos se levantaron para desayunar y poner en práctica el plan. Salieron al escalón de la puerta principal y se desaparecieron. En el Ministerio aturdieron a una bruja llamada Mafalda Hopkirk, en quien Hermione se convirtió. Después hicieron vomitar a un empleado de mantenimiento quien, después de mucho insistirle, se retiro a San Mungo ya que no paro de vomitar, Ron se convirtió en ese empleado. Hermione y Ron fueron a buscar a una tercera persona, en la que Harry pudiera transformarse, le trajeron los cabellos de un sujeto de barba, alto y de complexión atlética. Los tres amigos, ahora irreconocibles, entraron al ministerio atreves de unos retretes.
Harry chocó con alguien que se disculpo ya que al parecer Harry habia tomado la forma de un tal Runcorn, alguien de gran importancia o que inspiraba mucho miedo. El atrio del ministerio tenÃa una estatua de un mago y una bruja sentados en tronos labrados con cientos de cuerpos desnudos: muggles. Decidieron seguir su camino y cuando se formaron para tomar un ascensor, Yaxley llamo a un tal Cattermole, que resulto ser la persona en que Ron se habia transformado. Le dijo que tenÃa que arreglar su despacho, en el cual estaba lloviendo. Yaxley bajaba a interrogar a la esposa de Catermole y dio a entender que era mejor que arreglara su despacho si no querÃa que pasara algo saliera mal en la audiencia. Yaxley se retiró haciendo un movimiento de cabeza a Harry. Hermione le explicó a Ron que debÃa hacer en el despacho. Ron bajo del ascensor cuando llegó a la segunda planta. Hermione dijo que era mejor que ella regresara a ayudarlo, pero se interrumpió cuando llegaron a la primera planta ya que al ascensor entraron do magos enfrascados en una plática, otro con pelo largo y elegante y una mujer rechoncha con cara de sapo que sujetaba unos pergaminos.
